Mientras Guaymallén arde en escándalos, el concejal radical Miqueas Burgoa aún no encuentra la salida más digna de la política: su renuncia. Por Néstor Bethencourt

Esperando la renuncia…
Aunque todo el oficialismo —y medio país— lo espera con el mate en la mano, el edil sigue como si nada, resistiendo el archivo, los controles de alcoholemia y hasta la vergüenza ajena.
Burgoa, el hombre que se quedó dormido en el cargo
¿Quién es Miqueas Burgoa? Hoy por hoy, un concejal de Cambia Mendoza que no cambió a tiempo de volante ni de prioridades. Su 1,25 gramos de alcohol en sangre al salir de un boliche en Bowen, tras la ya mítica Paella Radical, fue solo el detonante.
El verdadero escándalo es su negativa a comprender que la política, a veces, exige dar un paso al costado. O al menos tambalear con un poco de dignidad.
Desde el jueves a la noche, todos —absolutamente todos— le marcan la puerta de salida. El gobernador Alfredo Cornejo fue tajante: “Tiene que renunciar”. Lo repitió sin titubear. Pero parece que Burgoa no escuchó, o aún no se le pasó el efecto.
¿Qué parte de “andate” no se entiende?
Si algo ha logrado el concejal en estas horas es la rara alquimia de unir al radicalismo: todos lo quieren lejos del Concejo Deliberante de Guaymallén. Desde su bloque, desde la Legislatura, desde el Ejecutivo, todos afirman —sin sonrojarse— que la permanencia de Burgoa es insostenible.
Pero ahí está. Sólido. Inexpresivo. Un silencio que habla más que cualquier defensa.
Ya ni sus compañeros quieren aparecer en la misma foto. Algunos se han escudado tras frases como “es un tema personal” o “la Justicia actuará”, pero todos saben que la renuncia es el único final posible.
Un currículum que no ayuda…
Por si fuera poco, Burgoa no manejaba solo. Estaba acompañado por un asesor de Marcelino Iglesias (sí, el exintendente) y dos militantes más. Para sumarle condimentos, no tenía licencia de conducir encima, ni batería en el celular para mostrar el carnet digital. Todo mal.
¿Y qué hizo cuando la policía quiso secuestrar el auto? Se negó. Claro, funcionario público, inmunidad diplomática, o quizá solo estaba muy confundido. Terminó demorado en la comisaría. No, no es chiste. Es de Guaymallén.
La silla vacía que incomoda a todos
Lo más irónico es que el Concejo Deliberante no sesionaba hace semanas. Y ahora que se reunirán, el escándalo Burgoa opacará cualquier otra discusión. ¿Qué harán los colegas concejales de bloque? ¿Lo defenderán? ¿Le pedirán formalmente que se vaya?
El concejal josé Pozzoli fue claro y contundente al presentar un pedido de remoción en la sesión de ayer jueves en el HCD guaymallino. La nota al respecto aquí.
Esta vez el silencio no es el método oficial.
En un municipio lleno de expedientes polémicos, sillas rotas, viandas millonarias y consultorías de cartón, uno pensaría que el caso de un concejal borracho sería menor. Pero no, lo de Burgoa fue una sobredosis de desvergüenza institucional.
¿Y la renuncia para cuándo, Miqueas?
Algunos en redes sociales ya especulan con títulos de canciones: “Despacito”, “No me voy”, “Me rehúso”. Pero la realidad es mucho más trágica que cómica. Burgoa está solo, expuesto y deslegitimado.
La única salida que podría aliviar el bochorno es su renuncia. Pero no llega. Y cada minuto que pasa sin ese gesto lo hunde más.
Mientras tanto, Cornejo espera. El oficialismo espera. La oposición espera. Guaymallén espera. Y nosotros, desde Ecos Mendocinos, preparamos el cronómetro.
¿Cuánto más va a resistir lo inevitable?
🛑 Burgoa, el único que no se dio cuenta que ya no lo quieren ni en la banca ni en la peatonal.
📝 Para más noticias de Guaymallén y escándalos sin resolver, visitá Ecos Mendocinos
Es muy importante para nosotros que comparta la noticia, y también su colaboración.
Entrando al siguiente enlace podrá hacer un donativo que nos ayudará a seguir adelante. En: https://cafecito.app/nestorecosmendocinos , allí podrá elegir la cantidad de donativo, y abonar.
También pueden suscribirse en redes.
Desde ya, muchas gracias!
Pueden contactarse al WhatsApp: 261 2327760, o al mail: denuncias@ecosmendocinos.com.ar